![[Imagen Textil]](/images/logo.png "[Imagen Textil]"){kind=logo}
El Palais d’Iéna en París es el elegido para albergar el desfile donde Miu Miu presenta su colección para el otoño de 2024. En el interior unas enormes pantallas representan un corto de la artista multimedia Cécile B. Evans.
La música de ritmo trepidante marca el paso de las modelos, serias y con la mirada fija hasta que una sonriente Ángela Molina sorprende sobre la pasarela. Su larguísima melena de color gris se mueve de un lado a otro, mientras la actriz sonríe mirando a los asistentes.
Un soplo de aire fresco y espontaneidad. Así podría describirse su paso por la semana de la moda. La actriz luce un vestido de punto canalé camisero, una camisa verde pistacho y rosa y una chaqueta de ante con apliques de pedrería. Unos guantes amarillos largos y unas merceditas con algo de tacón completan su estilismo, cuyo aspecto desenfadadamente sofisticado le sienta como un guante.
Y así, a sus 68 años, Ángela Molina se ha convertido en una de las modelos más inspiradoras de la semana de la moda de París. Una edición que la actriz ha seguido de cerca, pues el pasado viernes la veíamos en la primera fila del desfile de Loewe. Miuccia Prada ha subido a la pasarela de Miu Miu a otra actriz veterana, la británica Kristin Scott Thomas.
Y la doctora de origen chino, Qin Huilan, apasionada de la moda, de todo el universo Prada más concretamente, cumplía el sueño de desfilar para Miuccia a sus 70 años.
La presencia de estas tres mujeres es la constatación de que las marcas buscan modelos de más de 60 años con las que representar a este grupo de mujeres cada vez más numeroso, que se interesa por la moda y tiene el poder adquisitivo para comprar prendas de lujo. Aunque su presencia en este caso está también justificada por el concepto que Miuccia Prada ha puesto detrás de su nueva colección. En ella se alternan prendas clásicas, desde abrigos de piel, hasta collares de perlas, camisas blancas o abrigos de paño gris, con otras de referencia juvenil como sudaderas con cremallera, estampados pop en colores neón, toreras de cuero o medias en tonos llamativos y cazadoras vaqueras cropped.
“Creo que son clásicos”, decía Miuccia Prada a la prensa tras acabar el desfile, “Cada uno puede elegir con esta colección ser una niña o una mujer. Cada mañana yo decido si voy a ser una chica de 15 años o una mujer que se acerca a la muerte”. Y solo algunas mujeres como Ángela Molina pueden albergar todas las edades con su actitud y su energía.
